dos dias

levantarse tarde es un lujo a veces... creo que me culpo al hacerlo algunas veces.
el moverse despues por la casa, intentar que el dia sea productivo con cosas que aplazan solamente la tarea principal...
comer, sacarse el pijama, vestirse, peinarse, arreglar el bolso, cargar con pesadas cosas la espalda y la cabeza... ya comienza la ruta, pero hay algo en el camino que no es del todo denso, esa imagen que a veces es intangible y otras corporeamente fragil... la ruta posiblemente depare alguna sorpresa, que al pensarla mucho puede que no llegue a concretarse.
y no fué... lo pensé mucho, lo imaginé mucho, ahora estoy sentada escuchando cancioncitas que interpreto.
ayer fue huatacondo... calor como directo del centro de la tierra, unas caminatas eternas en busca del manantial, flores, puerquitos, piedras, dolor de cabeza, fideos con palta y esa poza fresquita con cinco pares de pies felices... inmejorable.
me ponen cada vez mas feliz las cosas asi.